martes, 29 de abril de 2008

Combis y algo mas...

Es muy difícil empezar a escribir este artículo porque no sé por dónde empezar. Hace mucho que no escribo, ni mi nombre, jeje. Pero el motivo que me lleva a escribir esta oportunidad es una realidad propia de la ciudad de Lima y que no se compara con alguna otra provincia del resto del Perú, ni mucho menos, con otras capitales de los países del mundo.

No existe un horario de trabajo establecido para todos, algunos a las 6, otros a las 7.30, otros a las 9, otro grupo más empieza a la media noche sus labores, pero sobre todo, el tiempo es el peor enemigo que tenemos los que vivimos en la capital del Perú.

Trataré de retratar en cierta medida la vida que lleva una persona desde que abre los ojos muiy temprano por la mañana hasta que los cierra nuevamente por la noche. Suena el despertador, de nuevo amaneció. Algunos se paran directo a prender la terma para que el agua caliente mientras preparan el desayuno, alistan su ropa, cocinan, en fin, una serie de cosas que te demandan tiempo. Te metes a la ducha, te relajas, te cambias y si te da tiempo para desyunar lo haces, sino sólo bebes un vaso con jugo, uan taza con leche, con café o un vaso con agua y disparas al trabajo, porque sabes que tu combi pasa a una determinada hora. No puedes demorarte un minuto más porque sino pierdes tu carro y si esperas al otro son 10 minutos más que siginificarán unos 20 minutos de retraso en la llegada a tu trabajo porque el tráfico en cada minuto que corre se vuelve más caótico y estresante.

Subes a la combi, que más parece una casa rodante. Personas durmiendo plácidamente en el último asiento trasero del carro. Otro grupo de personas conversan amenamente de lo mismo de cada día "el bendito trabajo". Una señorita parece que no le importara el mundo porque se encierra en el mundo de su MP3 o celular con radio para que su viaje sea el más corto y menos estresante. Otro alumno universitario lee con premura su separata para el examen que tiene en media hora. Una señora sube y sin saber cómo, se hace un campo para ella y para su bolsa de compras para preparar los santos alimentos del día. Un joven lee atentamente el libro que recién se compró (lo se porque lleva pocas páginas leídas). El cobrador que no se cansa de gritar la ruta que lleva la combi. "Todo Arequipa, Larco mar, Chorrillos, Ovalo de Miraflores". Y su pedido de siempre pensando que las personas somos sardinas, "Atrás hay sitio, por favor avance. Los que van a bajar, por favor avancen".

Los que vamos sentados ni los que vamos de pie disfrutamos del viaje. Los que vamos "cómodamente" sentados tenemos que soportar que las personas que van de pie nos rocen, nos pongan "sus partes intímas" en nuestro rostro cuando tienen que arrimarse para que las personas que vayan a bajar puedan pasar por detrás de ellos. Y bueno, los que vamos de pie tenemos que soportar que nos punteen, nos empujen, nos pisen, nos arruguen la ropa, nos ensucien el pantalón.

Pasamos una buena parte de nuestra vida en las combis. La combi se convierte en un lugar detestable por las viajes que parecen interminables de casi 2 horas para llegar a tu casa de regreso del trabajo, pero también es la vía más económica, práctica y sencilla de llegar a nuestro destino. Las combis ya son parte de nuestras vidas porque son la herramienta por la cual podemos transportarnos de un lugar a otro. De una combi suben y bajan cientos de personas día a día y dejan una parte de su vida en esos vehículos llamados "COMBI".

Si nosotros pudieramos decidir no subir a una combi una vez que ya vemos que hay muchos de pie, las cosas podrian ser distintas. Nosotros mismos ocasionamos que nos amontonen como simples paquetes y que donde debieran entrar 30, metan 50 personas y que a pesar de eso, nos digan "al fondo hay sitio", eso es el colmo. Algo muy cierto es que si esperamos la otra combi o esperamos que pasen combis con pocas personas pa estar comodos nunca llegariamos a nuestros destinos. tenemos que equilibrar las cosas, tenemos que aplicar la ley del costo de oportunidad de economia. Sacrificar una cosa por obtener otra. Estoy bien o que podriamos hacer?

Otro factor importante es el lugar donde subimos y bajamos. Nosotros mismos en reiteradas veces hemos hecho detener a la combi a mitad de la pista, cuando ya cruzaba la esquina hemos hecho que se detengan en lugares donde no se puede detener. Si nosotros respetaramos los paraderos, las combis no tendrian porque pararse en donde sea, por lo tanto no tendriamos que reclamar. "Te he dicho que bajo en la esquina, o estas sordo? Claro, pero pa que suban ahi si paras donde quieras". Cuantas veces hemos escuchado, e incluso, hemos gritado en las combis al momento de bajar porque nos dejaron lejos de donde debimos haber bajado.
Todo esta en nosotros, si nosotros cambiamos las combis cambian, por lo tanto ya es hora de que hagamos respetar nuestros derechos y de cumplir con nuestros deberes.

"la ciudadania esta compuesto por ciudadanos, la ciudadania la hacemos los ciudadanos"


domingo, 17 de febrero de 2008

Asi se aprende...

Luego de un mes y once días vuelvo a publicar otra entrada. Han pasado y he vivido muchas cosas en este tiempo. Como lo dije en un artículo anterior, la vida en la capital no es fácil, salvo que tu familiar sea ministro o congresista y te consiga un puesto como asistente, jeje. Lo cierto es que ningún trabajo es seguro, pero sí todos los trabajos te enseñan algo, aunque sea algo pequeño. Mi paso por la compañia Claro, me enseñó que a veces uno se pasa 8 horas sentado en una silla sin vender nada, pero con la seguridad de que un día trabajado son 20,30 o tal vez más soles ganados. Pero no te confies porque al final del mes te pueden sacar si no estás cumpliendo tus metas y cuotas o porque simplemente tus superiores no entienden que vender un celular al día no es cosa fácil, a pesar que ellos ya lo vivieron. Aprendí también que el celular a pesar de ser un bien, últimamente visto como necesidad comunicativa, no es un producto que se mueva o salga muy rápido. Son muchas las personas que aún no cuentan con un celular, pero a pesar de eso a veces la falta de dinero es más fuerte que satisafacer un lujo o necesidad. Pero también es cierto que son muchas las personas que hacen uso de una tarjeta de crédito, de Saga, Ripley o cualquiera de ella para comprarse un teléfono celular caro, pero sin embargo cuando se trata de satisfacer una necesidad primaria no gastan ni un sol o simplemente no hace uso de sus tarjetas. Hay de todo en el mundo, pero al fin y al cabo tenemos un parecido, los peruanos somos así, somos "Pitucos", somos "Ricos", alguien que me desmienta....!!!!!!
Bueno, me gano la hora en la cabina (porque pa matar el aburrimiento en la calle alquile una maquina), cuando este en casa terminare este artículo...no se lo pierdan

Dios me ha dado la oportunidad de trabajar en una empresa transnacional con sede en varios paises del mundo y que recientemente aperturo, hace 2 anos, una sucursal aqui en el Peru. EDITORIAL PLANETA PERU SA. Esta editorial tiene mas de 50 anos en el mercado internacional, tiene cadenas de television, periodicos, productoras de cine y muchas empresas mas que son parte del FONDO PLANETA.
Tengo a cargo el area de Placismo, que es?Placismo, es un prestamos linguistico utilizado para el trabajo de venta de libros en plazos. Enciclopedias, Diccionarios de cultura general y algunos tematicos y tambien libros para ninos son algunos de los titulos que vendo. Mi publico no es el consumidor final; ahora mi publico es mucho mas grande, pero a la vez mas cerrado, yo busco a Placistas(personas que venden a plazos) y a distribuidoras que tengan un poder de adquisicion fuerte para poder comprar los libros en grandes cantidades necesitando para eso contar con el respaldo de un buen capital economico y seran ellos quienes se encargaran el producto en el consumidor final. Mi zona de trabajo son las provincias y la capital; es decir, viajare por el Peru vendiendo mis libros y conociendo tambien lo lindo que es nuestro Pais.
Ya he tenido la oportunidad de estar en el norte por Piura, Chiclayo y Trujillo. Conoci mucho de este trabajo, pero sobre todo he aprendido que no es un trabajo tan sencillo como el que realize en Piura vendiendo 1 o 2 libros diarios o por semanas, ahora mi meta es vender 50, 100, 500 ejemplares a un solo cliente.El trabajo es mas fuerte, pero la recompensa en el pago te anima a seguir adelante. Recien llevo 19 dias, pero se que puedo hacer mucho en esta empresa, puedo crecer y desarrollarme en la vida profesional. Puedo y tengo que la seguridad que crecere como Comunicador, se que es un camino largo y duro, pero confio en que Dios y mi Padre me iluminan y ayudan desde arriba. Se que mi Padre esta conmigo todos los dias y esta a mi lado a cada instante, ahora el destino me lleva por el area de trabajo en la que mi padre se desarrollo por mas de 15 anos:LAS VENTAS, con la diferencia que el viajaba vendiendo medicinas.

Lo mas importante es que cuento con el apoyo de mi familia, se que si tropiezo y caigo ella esta para ayudarme a levantar y se que se soy grande, mi grandeza y mis triunfos la comparto con ella y con mis AMIGOS.

No se que me depara el destino, pero se que Dios esta conmigo y no temo lo que pueda venir mas adelante. Lo unico que yo pido es que no me dejen en el dia a dia y me den fuerzas para seguir adelante; sabiduria,para cada dia aprender mas y aplicarlo en cada jornada de trabajo; paciencia, para comprender a mis clientes y saber esperar nuevas ventas, pero mas que eso le doy gracias por lo que tengo, por lo que soy y por la vida y la familia que me ha dado, asi como tambien por los amigos (no digo buenos o verdaderos amigos, porque amigos solo son uno).

GRACIAS DIOS MIO POR LA VIDA Y MEDIANTE MI PADRE, GUIAME EN EL DIA A DIA, CUIDA A MI FAMILIA Y DALES DE ACUERDO A SUS NECESIDADES. AMEN

domingo, 6 de enero de 2008

Un nuevo comienzo

El 10-11-2007 fue un día muy importante y decisivo en mi vida. Una fecha que ha marcado el inicio de una nueva vida para mi y para los mios. Han transcurrido casi dos meses desde que decidí cambiar de vida, darle un giro de 360 grados a mi vida e ir al encuentro de mis sueños, pero para hacerlos realidad. Vine a Lima con mis maletas llenas de planes, objetivos y metas. Acá la vida no es fácil, no consigues trabajo en una semana, ni en un mes, salvo que conozcas a medio lima y te coloquen en un puesto rápido. Aquí hay que lucharla y pasar momentos duros sin dinero, pero como dice el dicho:"Dios ahorca pero no aprieta", así que al final del túnel hay una luz que todos los que luchan por salir adelante, llegan a verla. La vida aquí es muy rápida, corres contra la hora porque las distancias asfixian las horas interminables de viaje en las que tienes que soportar malos olores de personas a quienes no les gusta la limpieza diaria, los gritos de los cobradores de combi, te das un baño de dióxido de carbono y te alimentas de neblina y humedad en épocas de invierno. El sol, en el verano, calienta pero no desespera como en mi Piura querida. Al menos, hay algo bueno dentro de lo malo.

Aquí en la "Oscura Lima", a pesar de haber más competencia profesional y en donde la mayoría de los trabajos se consiguen por vara, las oportunidades de crecer profesionalmente son mayores. Tu trabajo es mejor remunerado y tus salarios, en algunas empresas, no son nada despreciables.

Pero también hay algo cierto, si bien en la capital o en cualquier otro departamento del Perú te pagan bien, el sueño de muchos de emigrar a Europa o EEUU, abarrota año a año las embajadas respectivas para ir al encuentro de sus sueños en donde la vida es mucho más dura pero se ve recompensado por un buenísimo salario. España, EEUU, Canadá, México, y otros países son los principales destinos de muchos compatriotas.

Perú es un país donde el trabajo si bien no rebalsa, sí existe, sólo que las oportunidades se presentan a quien tiene las habilidades y cuentan con los conocimientos necesarios para poder ser un profesional eficaz y eficiente en su campo de acción. Estamos en la era del conocimiento, donde el que sabe más, vale más. Así que no nos dejemos amilanar por los malos momentos que podamos vivir en una época de la vida, es sólo un momento, porque al final del camino brilla el sol y porque después de la tormenta viene la calma, y porque Dios existe.